Llegar a Londres es siempre sentir que llego a mi hogar... "Home sweet home"...
Recuerdo la primera vez que atendi a este llamado fuerte del corazon, aun sin entender el por que. Cuando el avion sobrevolaba el rio Tamesis, mi corazon comenzaba a latir de tal manera que pense iria a escapar de su encierro en cualquier momento.
Ese primer mes de enero fue misterioso, porque todavia no entendia la razon por la cual muchas veces me encontraba caminando sin destino, pero siempre terminando en la vera del rio... Solia pasar horas con mi mirada perdida en la profundidad de sus aguas turbias.
Al partir, esa primera vez, y sobrevolar nuevamente el rio, senti una punzada tan aguda, como si se me partiera el corazon de tristeza...
Volvi otras veces, predestinada por la gitana de Covent Garden, y mi camino al rio se volvio una rutina. Sin hacer caso de los innumerables turistas, ni del canto de las gaviotas, o del pasar del tiempo, me mimetizaba con el movimiento de sus aguas.
Creo que mi corazon estaba preparandose para lo que vendria a suceder mas adelante.
El encuentro de las almas a traves de los tiempos es inevitable... Asi encontre mi alma gemela... En la vera del rio... Por mas que realidades de espacio y tiempo quisieran separarnos, la magia del encuentro es inevitable si se escucha el grito silencioso del corazon. Quiso el destino que surgieramos del mismo rio que nos habia separado en el pasado...
El circulo se habia completado...
El guerrero, finalmente, seduce al tiempo en soledad, y bajo su mirada cautivante, abre los portones de la verdadera existencia rescatando a su musa de la oscuridad.
Quiera Dios que la magia del vaiven de las aguas del rio, siempre me permitan revivir la magia del encuentro del Amor!